Toco tus palabras,
oigo tus curvas,
miro tu aroma,
saboreo tu presencia.
Mis sentidos se resumen,
mutan y cambian,
se simplifican en tu ser.
Te siento completa.
Y me siento completo.
¿Seguimos siendo dos,
o hemos creado a un ser superior?
¿Somos dignos de tal atribución?
En el gran plan esta prescripto
que hoy yo ya no sea,
que vos tampoco seas.
Que hoy abandone a mi cuerpo, y vos al tuyo
y nuestras almas como arcilla
se entreguen a fundirse
en la idea de la pasión.
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